Futbol
Seis años del No era Penal: ¿qué hubiera pasado si no lo marcaban?
Hace seis años las ilusiones de la afición mexicana por ver al Tricolor en el anhelado quinto partido se vieron truncadas en los minutos finales del partido frente a Holanda por los octavos de final
Todos los aficionados al futbol lo recordamos aquella tarde de domingo 29 de junio del 2014 frente al televisor y algunos afortunados en el estadio Castelao de Fortaleza, la selección mexicana se jugaba una vez más ese anhelado boleto a los cuartos de final y por fin romper esa muralla del quinto partido.
Miguel Herrera era entonces el director técnico y una generación con representantes en el Viejo Continente sumado a los elementos del América y León que sorprendieron en el torneo local, esperaban por fin terminar con esa maldición frente al actual subcampeón del mundo, Holanda.
No obstante la historia fue la de siempre, pero con un dolor extra por haber ocurrido con un penal dudoso en los minutos finales de un encuentro que poco a poco se le escapaba de las manos a el Piojo y compañía, pero qué hubiera pasado si aquel clavado de Robben hubiera sido ignorado por el árbitro.
Realmente el escenario no lucía tan alentador, al horizonte se asomaban los tiempos extras en un caluroso medio día en la ciudad de Fortaleza y el plantamento de ambos equipos lucía muy diferente; México se veía agazapado tratando de mantener aquella anotación de Giovani dos Santos que le daba una pequeña esperanza, mientras Holanda seguía asediando la portería de Guillermo Ochoa, entonces figura tras su actuación ante Brasil.
La delantera mexicana ahora la conformaba Javier ‘Chicharito’ Hernández y Javier Aquino ocupando las posiciones de Giovani y Oribe Peralta, una ofensiva que a pesar de la experiencia de ambos, no causaba estragos en la defensiva holandesa.
Aquino había cometido un error en la marcación al momento del empate y ahora su velocidad no alcanzaría para mucho en los momentos clave, México necesitaba ir al ataque, pero en los último 30 minutos del tiempo regular sólo consiguieron acercarse un par de ocasiones sin causar peligro, por 11 llegadas de la escuadra europea.
La prórroga se habría convertido en un calvario con otro fin de tragedia como en EUA 1994 ante Bulgaria y ante Argentina en Alemania 2006, las cartas estaban echadas y ese quinto partido tendría que esperar cuatro años más.
Quizá, sólo quizá, México habría resistido el marcador igualado por 30 minutos más y en la tanda de penales, otra de las condenas del futbol mexicano, el destino habría sido el mismo.
