Sus perfiles desconocidos

Una vecindad llena de talento: 3 profesiones "ocultas" de los personajes del Chavo

Jamás lograremos olvidar a los entrañables personajes del Chavo del 8; ni tampoco intentaremos hacerlo. ¡Si hasta hemos perdido la cuenta de cuántas carcajadas nos han "robado"!. Pero cada uno de ellos tenía su perfil y, muchos, tenían otras profesiones antes de triunfar en la TV. ¡Conozcámoslos!.
sábado, 31 de octubre de 2020 · 08:18

El Chavo del 8 fue, es y será una de las mejores series que dio la televisión mexicana; por no decir "la mejor". Además de las risas a carcajadas que nos quitaron -y quitan todavía- sus episodios, o el mero hecho de verlos; su historia enamoró a toda América Latina y al mundo.

Pero cuando las cámaras se apagaban, cada uno de los protagonistas tenía su historia, su vida y sus profesiones. De hecho, muchos de ellos habían iniciado su rumbo por otros senderos antes de encaminarlo por la producción artística y televisiva.

Fuente: Instagram @carlos_kiko1

Chespirito

La cabeza y el cerebro detrás del Chavo y de todos los programas de Chespirito era Roberto Gómez Bolaños; quien precisamente recibía ese apodo como una adaptación de un "pequeño Shakespeare", o "Shakespearito". Pero antes de convertirse en uno de los personas más famosos y aclamados, Gómez Bolaños había elegido otro rumbo.

De joven obtuvo su título de Ingeniero en la UNAM; aunque -para ser sinceros-, nunca ejerció como tal. O sí, podría decirse que sus conocimientos los aplicó para construir y edificar una de las series más importantes de la historia. Además, era aficionado a los deportes; tanto que practicaba fútbol de chico y llegó a incursionar como boxeador amateur.

El Señor Barriga

Antes de ser "todo barriga, Señor Corazón... Eh, eh; todo corazón, Señor Barriga"; Edgar Vivar había encaminado su perfil para el lado de la salud. Desde chico tenía en claro que quería ser médico, e ingresó a la Facultad de Medicina de la UNAM. Y hasta hizo sus prácticas de residente previas a recibir el título en un hospital de la Ciudad de México.

Sin embargo, mientras estudiaba medicina; se inscribió en un taller de actuación. Y ese perfil -hasta entonces desconocido- fue creciendo en su interior; tanto que con el tiempo lo llevó a considerarlo como el protagónico en su vida, y dejar de lado también la medicina.

Quico

Antes de convertirse en Quico, aquel niño mofletudo y que era el compinche número uno del Chavo; Carlos Villagrán tuvo su incursión por otra arte: la fotografía. A fines de los 60 se desempeñó como reportero gráfico del periódico El Heraldo y hasta fue acreditado en los Juegos Olímpicos de México '68

Fuente: Instagram @carlos_kiko1

Gracias a su rol como fotógrafo tuvo acceso a los estudios de Televisa; y así terminaría por vincularse con Gómez Bolaños para hacer su ingreso triunfal en El Chavo del 8.