A 45 años del estreno

"Nunca la van a pasar en la radio": la historia de Bohemian Rhapsody, la canción más famosa de Queen

Tres veces número uno en los charts (en distintas épocas), más de 1.300 millones de reproducciones en Spotify y una de las mejores canciones de la historia. El 31 de octubre, Bohemian Rhapsody cumplió 45 años. La historia de la pieza que, según la discográfica en 1975, "nunca iba a ser un hit".
domingo, 8 de noviembre de 2020 · 07:01

El 31 de octubre de 1975 veía la luz una de las composiciones musicales más perfectas de la historia. Una historia que combina palabras como Bismillah (denominación que le dan los árabes a Dios) y Belcebú (forma de llamar al diablo), Scaramouche, Galileo; todo con la confesión de un hombre que mató a un hombre. Bohemian Rhapsody cumplió 35 años.

Surrealista para muchos; la historia de un hombre que vende su alma y luego se arrepiente, para otros (hay quienes sostienen que es una adaptación de la obra literaria clásica Fausto, del alemán Goethe); una maravillosa conjunción de acordes, arreglos musicales y vocales, para todos. La historia de la mejor canción de Freddie Mercury es casi tan compleja como la pieza.

Fue pensada, escrita y prácticamente interpretada en su totalidad por el mítico músico del bigotito; quien la compuso en su piano y hasta dio indicaciones al guitarrista de Queen, Brian May sobre cómo interpretar el memorable solo que marca el corte entre la parte operística con la "explosión rockera" de la Rapsodia Bohemia.

Fuente: Instagram @officialqueenmusic

“Esa canción nunca la van a pasar en la radio” fue la automática reacción del ejecutivo discográfico de la banda cuando escuchó por primera vez esta, cuando menos, sorprendente creación de 5 minutos con 55 segundos. Y, más allá de lo errado de la profecía, algo de lógica tenía este razonamiento: nunca un hit había alcanzado una duración cercana a los 6 minutos.

Sin embargo, los músicos de Queen -con Mercury a la cabeza- no estaban dispuestos a dar el brazo a torcer: querían a toda costa que el primer simple de difusión de su cuarto disco sea Bohemian Rhapsody. Y sostuvieron esta idea hasta el final, hasta imponerla... ¡Por suerte!.

Innovadora

Otro de los rasgos distintos de esta magnífica creación era que no tenía -ni tiene- une estribillo. De hecho, no había antes ni hubo después otra pieza que no tuviera ese fragmento que se repite y que es el primero que se graba en nuestras memorias. ¿Cómo lograr que una canción sin estribillo sea considerada una de las mejor de la historia?. Freddie tenía la respuesta.

Fuente: Instagram @freddiemercury 

Un inicio cantado a capella, un piano que introduce a la parte instrumental, un maravilloso juego vocal que coquetea con la ópera, un fragmento especial de altibajos donde entran las menciones a Galileo, el Figaro y la Mamma Mia (aquí se superpusieron más de 180 grabaciones) y el explosivo desenlace dan vida al hijo pródigo de Mercury.

Y el propio cantante jugó con el misterio cada vez que se le preguntó por el significado de la letra de la canción. Por lo que cualquier lectura e interpretación que se quiera hacer es correcta; o todas son erróneas.

Fuente: Instagram @freddiemercury 

Récords

Luego de ser presentada el último día de octubre de 1975, Bohemian Rhapsody se mantuvo durante 9 semanas consecutivas como número 1 en los charts de Inglaterra. Y aunque con el correr de las semanas, los meses y los años fue bajando; la historia demostró que no hizo más que agazaparse para volver a saltar, esta vez más alto aún.

En 1992, de la mano de El mundo según Wayne y la escena en que los amigos agitan sus cabezas y melenas a bordo de un auto mientras suena la legendaria canción, Bohemian Rhapsody volvió a encabezar los ranking. Y, como no hay dos sin tres, la canción tuvo su tercera era mirando a todas las demás obras desde bien alto.

Fuente: Instagram @freddiemercury 

Fue en 2018, 43 años después de su estreno y cuando fue estrenada la biopic de Freddie Mercury y que casual -o causalmente- lleva el nombre de Bohemian Rhapsody.

Y, como por lo visto no pretende dejar récord sin romper; la pieza ya superó las 1.300 millones de reproducciones en Spotify y es la canción más escuchada en la app de streaming.