Almas piratas

Inédito: el día en que Luis Miguel y Ramón Valdés compartieron un videoclip del Sol de México

Los talentosos artistas mexicanos participaron del videoclip de Luismi, "Tu no tienes corazón", en 1984. Interpretaban a dos corsarios; y el video fue parte del cortometraje para televisión "Aprendiz de pirata". Fiel a su cómico estilo, el actor que daba vida a Don Ramón intenta marcar su autoridad
domingo, 9 de agosto de 2020 · 09:16

Si de talentos y figuras públicas legendarias de México se trata, Luis Miguel -el Sol de México- y el inolvidable Ramón Valdés -Don Ramón en El Chavo del 8- entran en el top 5 sin duda algunas. Por esto mismo es que pensar en una canción y en un videoclip que los reúna a los dos es, literalmente, hablar de una joya invaluable, de un tesoro de esos que suelen robar los piratas. 

Pues bien, todo esto existe; y es -literalmente- una joya audiovisual. En 1984, en el álbum Palabra de Honor; un adolescente Luis Miguel de 14 años interpreta el tema Tú no tienes corazón. Y el videoclip publicitario de este tema (que no está entre los éxitos inolvidables de Luismi, precisamente); reúne a los dos talentos: el cantante y Ramón Valdés.

El video

El video propiamente dicho tiene una duración de 3:15 minutos; y muestra a un joven de 14 años y a un hombre experimentado en el rol de dos piratas que llegan luego de mucho navegar a la costa de una isla remota. Entre los protagonistas -que no son otros que Luis Miguel y Ramón Valdés-, "Monchito" hace valer su experiencia y su autoridad para darle la orden al adolescente de que cave en soledad; mientras él se recuesta a reposar sobre la calma arena.

Fuente: Instagram @lmxlm

 

Aprendiz de pirata

Más allá del videoclip propiamente dicho, toda esta trama y ficción que pone a los dos talentosos artistas en el rol de bucaneros es parte del cortometraje Aprendiz de pirata (también de 1984), emitido por Galavisón; y donde ambos interpretan a un par de corsarios.

 

Valdés interpreta al tío del joven, quien sueña con convertirse en un famoso cantante. Pero el hombre mayor no renuncia a su misión: verlo como pirata. A lo largo de la trama, Luis Miguel encuentra una lámpara de los deseos (al mejor estilo Aladdin) y convierte su ilusión en un deseo concreto.