La historia del abogado argentino que actuó en Vikingos como soldado ruso y guardaespaldas del rey

Durante los casi nueve años que transcurrieron desde el estreno del primer episodio de la temporada uno, la serie histórica Vikingos no dejó de sumar adeptos y popularidad. La historia de Ragnar, uno de los guerreros vikingos más legendarios que haya existido, de sus travesías y las de sus hijos dieron vida a una de las series sensación de Netflix de la última década.

En el mundo entero se comenzó a hablar cada vez más de estos pueblos milenarios del Norte y de la Península Escandinava, de sus historias legendarias y del cruce entre la historia documentada sobre su cultura y tradiciones con la versión ficcionada que nos trajo Michael Hirst. Vikingos se convirtió en un fenómeno mundial.

Y entre tanta gente en la que la serie marcó un antes y un después en su vida, se encuentra el abogado argentino Fabricio Lucero. Este joven de 27 años,quien nunca había pisado un escenario de teatro ni actuado frente a la cámara, se encontró casi de casualidad con una oportunidad que, sin dudas, cambió existencia: interpretó y dio vida a dos personajes de Vikingos.

Un argentino en Irlanda

En diálogo con el diario Perfil (Argentina), Lucero contó que siempre fue fanático de la serie, y que la veía con su hermano y sus amigos. Y que, cuando decidió viajar a Irlanda para estudiar inglés, se enteró de que en ese país del Reino Unido se filmaba Vikingos, por lo que -sin nada que perder- envió su CV y se postuló por si, de casualidad, precisaban de un extra.

"Primero, preparé una foto haciéndome el vikingo en la casa de un amigo que tenía arcos y flechas. Me acuerdo que estábamos tentados los dos haciendo las fotos; y con eso empecé la aplicación que era online. Te pedían todos los requisitos para trabajar en Irlanda, de lo contrario ni la miraban: número de la seguridad social, cuenta de banco en el país y visa o pasaporte europeo. Una vez que tuve todos los requisitos ahí sí fui al casting. Me hicieron unas fotos y llené formularios con mis experiencias y habilidades", relató el argentino al diario de ese país, nacido en la provincia de San Luis.

Su entrada en escena se da recién en la segunda parte de la sexta y última temporada de Vikingos, los diez capítulos que fueron estrenados a fines del 2020; también en Netflix. Y, no conforme con interpretar en el primero de los episodios en que participa a un soldado del ejército de los Rus; luego volvemos a verlo como guerrero del Rey Alfred, de Wessex.

"La experiencia fue increíble. Todo lo que es el maquillaje, los vestuarios, el set de filmación, los lugares que visitamos, como hacen los efectos especiales, todo. Me sorprendía mucho la cantidad de personas que hay detrás de cada escena. A veces se tardaban horas en filmar algo que después son segundos o un minuto de un episodio. Lo mismo con la gente de producción que de repente montaba un pueblo en medio de la nada de un día para otro", agregó a Perfil..

Su relación con los protagonistas

Aunque las grandes estrellas y protagonistas principales de la serie (como Alexander Ludwig -Björn- o Alex Andersen -Ivar, el deshuesado-) tenían sus propios camarines, al momento de desayunar compartían todos el mismo espacio. Y eso le permitió al abogado argentino interactuar con algunos de los personajes que él mismo admiraba desde que inició la serie.

"El actor que hace del Rey Harald (Peter Franzen) es muy buena onda. Y Ivar (Alex Andersen) también. Él es fotógrafo y estaba todo el tiempo sacando fotos. Le pregunté cómo había comenzado con la actuación y me contó que desde niño hacía teatro porque siempre fue su pasión. Y él sabía que en Argentina le dicen Vikingos a la serie y que es muy popular", recordó.

También quedarán para siempre en sus recuerdos las maratónicas jornada de grabación y rodaje en Wicklow, un pueblo ubicado a algunos kilómetros de Dublin (la ciudad en la que estuvo viviendo); las 12 horas filmando y sus preparativos colocándose y quitándose la armadura cada vez que la situación lo ameritaba.

"Ahora estoy en Australia, y acá fui a otro casting mucho más complejo en el que gané media beca para estudiar unos meses en una escuela de actuación en Sydney. Estuvo excelente. A veces llegaba muy cansado a las clases después de trabajar pero sentí que aprendí bastante y fue divertido. Después con el tema del coronavirus se frenó todo pero si surge alguna oportunidad linda, ¿por qué no?", concluyó al ser consultado sobre si tiene intenciones de seguir actuando.