Vikingos: el motivo por el que cambiaban de color los ojos de Ivar, y por qué significaban peligro

Ivar, el deshuesado es uno de los grandes protagonistas de la serie histórica Vikingos (disponible en Netflix); que a fines del 2020 llegó a su fin luego de 6 temporadas y 7 años de intensa acción, así como también de historias atrapantes de batallas, traiciones, y -por sobre todas las cosas- sentidas muertes.

El hijo menor de Ragnar Lothbrok, y a quien la serie Vikingos nos muestra como hijo de la princesa Aslaug (aunque dentro de las sagas históricas nórdicas hay versiones que lo señalan como hijo de la guerrera Lagertha, la primera esposa de Ragnar), tuvo su entrada en escena en la temporada dos. Y, con el transcurrir de los episodios, se convierte en uno de los protagonistas principales.

Su perversa mentalidad, la tiranía de sus actos y la maldad con que obra y se rige en su principal ambición -sumar cada vez más poder- lo convierten en un personaje realmente detestable. Sin embargo, el final de sus días (que coincide con los últimos episodios de la serie) nos muestran a un Ivar vulnerable, débil en lo emocional y que hasta -por momento- nos conmueve.

Y es en los instantes previos a su último suspiro en que, reforzado por las advertencias de uno de los hermanos de Ivar -su aliado, Hvitserk-; nos percatamos de una situación que experimenta el propio Ivar y que actúa como aviso de que él está en peligro. Y que el desenlace puede ser fatal.

"Tus ojos están más azules, hermano", advierte Hvitserk en medio de la batalla que ambos, al frente de un ejército vikingo, protagonizan frente a las tropas del rey sajón, Alfredo. Instantes después, Ivar muere en mano de uno de los soldados. Y la pregunta que nos quedó dando vueltas en la cabeza a todos es. ¿cómo y por qué el color de sus ojos anticipa el peligro?.

La explicación

La patología de Ivar, el deshuesado (interpretado por el actor Alex Hogh Andersen) no está explicada desde la ciencia en la trama de Vikingos, sino que directamente se adjudica esa malformación que le impide caminar y sostenerse en pie a un capricho de los dioses. No obstante, desde la medicina esta situación tiene su nombre y su explicación.

La patología congénita que presentaba Ivar, explicada desde la ciencia, se llama osteogénesis imperfecta; conocida popularmente como enfermedad de los huesos frágiles. Y se caracteriza por la facilidad con que se rompen los huesos de una persona. En aquellos años, esta situación le valió ser apartado por la sociedad. E incrementar su rencor.

Esta enfermedad puede, entre otras cosas, tornar la capa esclerótica (la blanca, hablando con términos conocidos) de los ojos de la persona que la padece de un color llamativo. Y en el caso de Ivar, quien se caracterizaba desde lo físico por el azul intenso de sus ojos, la osteogénesis imperfecta llevaba a que la totalidad de sus ojos se pinte de un intenso y llamativo azul.

Por esto mismo es que, tal y como advierte Hvitserk; en los momentos previos a la batalla final y cuando la totalidad de la superficie de los dos ojos de Ivar se pintan de un azul intenso, es un indicio de que sus huesos están más frágiles que nunca. Y esta situación termina por convertirse en los instantes finales de la vida de Ivar. el deshuesado.