Secretos de familia

Thalia: así fue la tenebrosa relación entre su padre Ernesto Sodi y su hermanastra Laura Zapata

En una reciente entrevista con Yordi Rosado, Laura Zapata recordó su infancia y aclaró que la relación que ella tenía con su madre y sus hermanastra siempre fue buena pero el problema era el segundo marido de su madre y padre de las chicas, Ernesto Sodi.
sábado, 9 de abril de 2022 · 11:11

La cantante Thalia de 50 años es una de las artistas más escuchadas y seguidas de la actualidad. Ella comenzó desde muy pequeña en el mundo artístico y una de sus impulsoras fue su media hermana Laura Zapata quien ya llevaba trabajand varios años como actriz en televisión. 

La relación entre Thalia y su hermana Laura Zapata ha tenido sus idas y vueltas pero siempre han estado muy unidas por la salud y el bienestar de su abuela materna, Eva Mange quien tiene más de 100 años y necesita de mucha atención. La madre de ambas Yolanda Miranda se casó en segunas nupcias con Ernesto Sodi y con él tuvo cuatro hijas entre las que está la cantante. 

En una reciente entrevista con Yordi Rosado, Laura Zapata recordó su infancia y aclaró que la relación que ella tenía con su madre y sus hermanastra siempre fue buena. “Nos queríamos, nos amábamos. Yo las amaba, las adoraba a mis hermanas...Yo las amaba, era una hermana realmente protectora, yo fui punta de lanza y siempre las jalaba cuando yo empecé que era muy chica”, comentó la actriz. 

Thalia. Fuente: archivo Terra

A pesar de que la convivencia con Gabriela, Federica, Thalía y Ernestina era buena, el problema de Laura Zapata era la pésima relación que tenía con el padre de ellas y segundo esposo de su madre, Ernesto Sodi. “Era una persona alcohólica, transgresora, era muy fuerte. Era una persona a la que yo le tenía miedo, de la que yo me tenía que esconder cuando él llegaba", relató Zapata.

Laura Zapata. Fuente: instagram @laurazapataoficial

Luego, Laura Zapata finalizó con un recuerdo teneboros y dijo: "Yo no tenía un espacio en la casa de mi mamá, una cama o algo así, entonces me dormía con alguna de mis hermanas cuando me quedaba a dormir, pero cuando escuchaba las pantuflas de ese hombre en el pasillo de la casa no quería respirar, me daba terror, pánico, pavor”.