El terrible suceso que “El Puma” José Luis Rodríguez ha ocultado y no quiere que se conozca

En plena actividad tras haber superado algunas complicaciones médicas, José Luis Rodríguez, ampliamente conocido como “El Puma” cuenta con cinco décadas de exitosa carrera en la industria musical. Aunque es innegable el enorme manejo que tiene José Luis de los escenarios y las multitudes, no puede decirse lo mismo de sus relaciones familiares.

Hoy en día “El Puma” pasa la mayor parte de su tiempo relajado en su mansión de Miami junto a su esposa Carolina Pérez, disfrutando del éxito conseguido con su esfuerzo. Conocido es que José Luis Rodríguez tiene una excelente relación con su hija menor Génesis Rodríguez. Pero es igualmente conocido que existe un hombre que se proclama su hijo no reconocido y se hace llamar “El Puma Junior”. Además también es de público conocimiento que no tiene la mejor relación con su ex esposa Lila Morillo y las hijas fruto de este amor, Liliana y Lilibeth.

Pero hay ciertos pormenores que José Luis Rodríguez se ha encargado y preocupado por ocultar. Varios años atrás la ex esposa de “El Puma”, Lila Morillo narró un hecho verdaderamente escalofriante. Según contó su hija mayor Liliana habría sufrido un hecho de abuso, perpetrado por un trabajador que se desempeñaba en la casa familiar, cuando la niña tenía tan solo 6 años. 

Pero lo peor de este relato es que el cantante se habría opuesto a realizar la denuncia pertinente por miedo a que esto afectara su carrera que en aquél entonces no contaba con el respaldo de tremenda trayectoria como lo hace hoy. De ser cierto esto que denunció en su momento Lila Morillo explicaría completamente el porqué de la distancia de “El Puma'' con sus hijas.

Cuando la pareja de José Luis Rodríguez y Lila Morillo se encontraba atravesando el divorcio un triste espectáculo mediático fue montado alrededor de la situación. Si realmente “El Puma” se negó a realizar la denuncia, no sólo le habría negado el consuelo de la justicia a su hija y su familia; sino que siendo más grave aún se habría convertido en encubridor de un caso de pedofilia, es decir habría protegido a un abusador de menores.