HOGAR
Cultivar sin tierra: 3 experiencias para compartir con los chicos
En sencillos pasos podrás cultivar vegetales sin utilizar tierra y después pasarlos a la huerta de jardín, aprendiendo con los más chicos de la familia.
Trabajar en el jardín a través de una huerta orgánica puede ser una actividad lúdica y de fácil aprendizaje para chicos, a quienes les podremos inculcar el valor de la naturaleza como así también alimentarse con vegetales caseros, cultivados y cosechados por ellos mismo. Es por eso que a continuación de contaremos 3 experiencias para compartir con los más pequeños del hogar y poder cultivar sin tierra, logrando tener sabrosos brotes.
Armar una pequeña huerta sin tierra, utilizando recipientes de agua, será una alternativa didáctica para llevar a cabo con chicos, vinculándolos con la naturaleza y alejándolos un poco de tanta tecnología. Aplicar esta técnica es muy fácil y en un puñado de días se podrán cosechar hojas y brotes que serán utilizados en variadas preparaciones gastronómicas, teniendo así una grata experiencia.
La primera opción para cultivar en tu jardín sin necesidad de usar tierra será trabajar con cebollas. Habitualmente, y después de un par de semanas de haber sido comprado, pueden aparecer brotes en la cebolla, generando un cambio de sabor en el bulbo, reflejando un fuerte olor a azufre y perjudicando el característico sabor de la hierba bienal. En este caso, esa cebolla brotada dará hojas sabrosas, por lo tanto se deberá trabajar sobre ella. Al vegetal brotado habrá que colocarle dos escarbadientes y cubicarla en un recipiente con agua, cubriendo las raíces. Dentro de una semana se comprobará que las nuevas hojas están saliendo del centro del bulbo. 14 días después se podrá trasplantar a una maceta o huerta y cosechar las hojas a medida que se necesiten.
El ajo también es una alternativa para cultivar en una pequeña huerta cuando comienza a brotar, ya que sus hojas serán usadas en tortillas o aromatizadores de ensalada. La metodología consistirá en poner el ajo en una pequeña taza con 2 centímetros de agua o en el jardín, dentro de una maceta con sustrato suelto, y después esperar a que crezca la planta perenne.
La tercera opción para aprender junto a chicos es cultivar berros, cuando éstos traen raíces. El procedimiento iniciará colocando en un frasco con agua las raíces de berros más robustas y una vez que se hayan desarrollado, trasplantarlas a un sector con sombra dentro de la huerta de jardín.
