¿Es bueno o malo dormir con gatos?

Una costumbre muy habitual para todos aquellos que tienen un “gatijo” es dormir con ellos ya que esto hace crecer un vínculo más cercano entre el felino y su dueño. Es por eso, que muchas personas prefieren que duerman con ellos para sentirse más felices y acompañados, aunque a pesar de que la mayoría de estos recurren a esta costumbre, son muchos los que se preguntan si está bien o mal.

Ante dicha situación es importante que hay ventajas y desventajas de dormir con un gato todas las noches, ya que aunque el vínculo sentimental se vuelve más fuerte, hay que mencionar que los gatos pueden ser portadores de infecciones si estos no son cuidados debidamente, es por eso que a continuación te mencionaremos los beneficios y lo que no debes hacer si quieres dormir con tu “michi”.

Beneficios de dormir con tu “neko”

El compartir el sueño con tu gato por las noches no sólo creará un vínculo afectivo más grande entre el dueño y el felino sino que también te ayudará a mantener un estado de relajación más grande y esto te ayudará a conciliar el sueño gracias al ronroneo de tu mascota.

También, aportará una mayor sensación de seguridad emocional para ambos.

Por otra parte, la gran parte de los gatos que duermen con su humano tienen una conducta más afectuosa, lo que afecta positivamente a la convivencia y a la relación entre ambos.

En tanto, si eres de las personas que se despierta de mal humor, tu gato te ayudará con eso, pues esa bolita de pelos causará que te despiertes de mejor humor y más feliz. 

Está comprobado que los niños que duerme con gatos, se mantienen más relajados y en paz durante su siesta.

Desventajas de dormir con un gato

Es importante señalar que para que un gato pueda dormir contigo, el dueño debe ser muy responsable con su cuidado, en este aspecto será indispensable llevarlo a sus chequeos de rutina con el veterinario, ya que las enfermedades que puede transmitir si no cuenta con los debidos cuidados son: hongos, campilobacteriosis, infecciones,enfermedad de Lyme, rabia, tiña y sarna.

Los parásitos internos y externos son otra situación que se debe tener a consideración si quieres que tu gato se duerma contigo, por lo que será muy importante desparasitarlos cada seis meses para evitar infecciones. 

En cuestión afectuosa, muchos dueños acostumbran a sólo dormirse con los gatos cuando son cachorros, para después mandarlos a su propia cama, esto le causará mucho estrés al felino por lo que deberás ayudar dandole un premio y así irlo despegando de su lugar para dormir.