Cáncer de páncreas: el síntoma de advertencia que no debes ignorar por nada del mundo

El cáncer de páncreas es un tipo de cáncer que se desarrolla desde la glándula pancreática y es considerada como una de las neoplasias más agresivas debido a que se propaga fácilmente y no suele mostrar síntomas tempranos. Aunque un reciente estudio reveló que existe una señal clave para detectar este tumor. Se trata de la fiebre, una alerta vinculada con otras patologías más severas y que en infinidades de veces suele ser confundida con un estado gripal.

De acuerdo a expertos, el cáncer de páncreas no muestra un síntoma que provoque pensar que el enfermo está atravesando este tipo de patología, aunque sentir que la temperatura corporal está aumentando, es decir que la persona está teniendo fiebre, puede indicar la presencia del cáncer.

En este contexto, la fiebre constituye un síntoma clave y poco conocido para detectar el cáncer de páncreas. En consecuencia, si la persona tiene más de 37.5 grados de temperatura corporal deberá acudir al médico para chequear las posibles patologías, debido a que este síntoma también puede representar otras infecciones como resfríos. Por lo tanto, si la temperatura sigue registrando picos elevados durante un largo periodo de tiempo, será necesario actuar de inmediato. Más todavía si se presentan otros síntomas, como los que mencionaremos a continuación.

Existen otras señales que pueden manifestar la presencia del cáncer de páncreas. Se trata de la orina color oscuro; picazón en la piel; problemas digestivos reflejados como heces anormales, vómitos y náuseas; coágulos de sangre. A estos síntomas debemos agregarles otros como diabetes tipo 1 y tipo 2 y pérdida del apetito. Por lo tanto, si uno de estos síntomas aparece y se combina con altos picos de fiebre, probablemente este tipo de tumor podría estar presente en tu organismo.

Según expertos, las posibilidades de padecer cáncer de páncreas se incrementarán si la persona muestra las señales mencionadas anteriormente y si practica otros hábitos tales como fumar constantemente y consumir alcohol a menudo. Además, personas que tengan antecedentes familiares o pertenecen a la vejez, también serán propensos a padecer el cáncer.