Toma asiento antes de conocer cuál es la bebida alcohólica que más grasa abdominal genera

El vino representa una bebida alcohólica mundialmente reconocida y con un prestigio supremo. Esto no solo se debe a su aroma y sabor, siendo perfecta para casi cualquier maridaje, sino también para sus beneficios a la salud, particularmente para el corazón. Otras de las bebidas más consumidas son la cerveza y los licores, las cuales están relacionadas al incremento de la grasa abdominal.

De acuerdo a expertos, toda bebida alcohólica fermenta de distinta manera, por lo que algunas están estrechamente vinculadas con enfermedades cardiovasculares, síndrome metabólico e incremento de la grasa visceral, entre otras afecciones. Mientras que a su vez, también hay bebidas que contribuyen a reducir diversos riesgos. En este marco, una investigación desarrollada por Brittany Larsen, docente en la Universidad Estatal de Iowa, reveló datos precisos acerca del vino, la cerveza y los licores.

Tras analizar a más de 1800 personas de entre 40 y 79 años de edad que viven en el Reino Unido, en donde un 60% fueron hombres, se determinó el efecto que tiene el vino en la salud, al tiempo que reveló el consumo de cerveza y licores está asociado a niveles de grasa visceral, explicado a partir de la alteración en los niveles de lípidos en sangre y a la resistencia a la insulina.

Mientras que en lo que respecta al vino, el estudio demostró que puede proteger al organismo de la acumulación de grasa visceral. Es que los estudios determinaron que los voluntarios que bebían vino tinto tenían los niveles más bajos de grasa abdominal. Esto debido a una reducción de la inflamación y un aumento de las lipoproteínas de alta densidad, por lo que se recomienda la ingesta medida de dicha bebida alcohólica.

Además, los voluntarios que manifestaron beber más vino blanco no mostraron este beneficio que si tiene el tinto. Pero su consumo tampoco incide en el aumento de la grasa. Es decir, no se ha registrado ninguna vinculación con la grasa abdominal. Además, la investigación demostró que el vino blanco ofrece su propia ventaja en los adultos mayores ayudándolos tener huesos más densos.