Fácil: así puedes elegir el fertilizante correcto para tu jardín

El jardín necesitará de fertilizantes para que las plantas puedan crecer con mayor fuerza y sus frutos y flores sean los mejores. Antes de realizar esta tarea de jardinería, es necesario que sepas cuál es la mejor alternativa para que los nutrientes sean los indicados en tu parque o huerto, asimilables por las plantes y adaptables a la superficie que tenemos de base.

Los fertilizantes son sustancias ricas en nutrientes que se utilizan para mejorar las características del suelo para un mayor desarrollo de los cultivos, ya sean plantas o vegetales, por ejemplo. Esta preparación puede ser orgánica o inorgánica y estimula el crecimiento de los ejemplares. Aunque además de aplicarlo en la tierra, es menester realizar distintos trabajos de jardinería como riego y poda.

Para mejorar las propiedades físicas, químicas y biológicas del sustrato, la estabilidad estructural, regula el balance hídrico del suelo reteniendo los nutrientes y nivelar los niveles de pH, es fundamental aplicar el fertilizante adecuado en el jardín o huerto. Todos los fertilizantes, tanto los orgánicos como los químicos, cuentan con varios componentes y es importante identificarlos. Lo primero que se tiene que conocer son los componentes mayores o primarios que son los elementos nitrógeno, fósforo y potasio. Estos se requieren en mayor cantidad y siempre está presente al menos uno de ellos.

Al determinar el elemento primario hay que enfocarse en el secundario, que puede ser calcio, magnesio y azufre. Es importante entender los componentes para tener mejor manejo sobre ellos. En el caso de los fertilizantes naturales, será esencial tener cuidado en los componentes ya que no generarán contaminación en los suelos, mejorando propiedades físicas, químicas y biológicas.

Además del trabajo de jardinería, es vital decidir la presentación de los fertilizantes porque, por ejemplo, el granular se disuelve paulatinamente para que la planta lo absorba según lo requiera y en promedio, debe aplicarse cada tres meses; mientras que el líquido es recomendable sólo para las plantas hipersensibles que necesitan minerales nutrientes específicos, como las violetas africanas, orquídeas y bonsáis y debe aplicarse cada 15 días.