VIDA SANA
Descubren un círculo virtuoso entre el ejercicio físico y el sueño que ayuda a mantener la pérdida de peso
La relación entre el descanso y la pérdida de peso, sumado a la actividad física, es cada vez más evidente. En esta ocasión, un importante estudio reveló los resultados vinculados entre ambas partes.
Para bajar de peso será fundamental una alimentación sana, al mismo tiempo de la realización de actividad física. Además del ejercicio diario, donde se recomienda al menos 30 minutos de duración, un estudio reveló que el sueño es fundamental para perder peso. En este contexto, te mencionaremos una importante investigación presentada en el Congreso Europeo sobre Obesidad (ECO), donde sus resultados son fundamentales para la salud.
El importante estudio estableció que restar horas de sueño y no dormir lo suficiente, sumado a un descanso de mala calidad e insomnio atenta contra los esfuerzos por bajar de peso. Es que los científicos hallaron que la pérdida de peso en adultos con obesidad mejoró la calidad del sueño, al mismo tiempo que el ejercicio ayudaba a bajar de peso y evitar el insomnio. Además, en la conferencia realizada en los Países Bajos se reveló que los adultos que no duermen lo suficiente no podrán adelgazar con la misma velocidad que lo hacen las personas que descansan óptimamente.
El vínculo entre menos peso y mejor sueño será trascendental para la salud de todas las personas, no solo en aquellas que buscan a bajar de peso. Mientras que es vital tener en cuenta que dormir poco o mal incrementará los riesgos de padecer hipertensión arterial, colesterol malo y diabetes, lo cual empeorará los cuadros coronarios y podrá provocar un accidente cerebrovascular.
Para este estudio, los investigadores analizaron los datos del ensayo aleatorizado S-LiTE, con el objetivo de investigar los cambios en la duración y la calidad del sueño durante la pérdida de peso inducida por la dieta. El campo de estudio estuvo compuesto por 195 adultos de entre 18 a 65 años con obesidad, los cuales siguieron una dieta baja en calorías durante dos meses y perdieron 12% de su peso. En el periodo para mantener los kilos bajados, también se examinó la calidad del ejercicio y el tiempo de sueño.
Para examinar la asociación entre el sueño y el aumento de peso, los participantes se agruparon según la duración y la calidad del descanso. Los investigadores encontraron que después de la dieta baja en calorías de 8 semanas, la calidad y duración del sueño mejoraron en todos los participantes. En consecuencia, la relación entre el trinomio “descanso-ejercicio-bajar de peso”, será fundamental para una mejor salud.
