HUERTO
Simple y económico: cómo cultivar lichis en el hogar
Una fruta con amplias propiedades para tu salud podrá ser sembrada, con estos trucos, en el huerto de casa.
En nuestro huerto podremos cultivar distintos productos orgánicos que después añadiremos a nuestra dieta diaria, ya sean frutas o verduras. Y en esta temporada, expertos recomiendan sembrar lichi, una fruta de color rosa, cáscara de color marrón y forma redondeada y que se caracteriza por sus propiedades que benefician a la salud: poseen alto contenido de agua, pocas calorías y son fuente de vitamina C.
Si bien originariamente es del sur de China, podrás cultivarla fácilmente en el huerto de casa, especialmente en los meses de mayo, junio, julio y la primera quincena de agosto. Y para tener éxito, solo necesitarás de un pequeño espacio de tierra para que la fruta crezca en óptimas condiciones (incluso puede ser en una maceta).
Para el sembrado del lichi necesitaremos 10 o 15 lichis para extraer sus semillas, tierra, un vaso de agua y una herramienta para manipular la tierra. El procedimiento es simple, porque luego de consumir la fruta tendremos que lavar las semillas, removiendo la pulpa. El siguiente paso consistirá en remojar en el vaso de agua por 3 días para que se hidraten y sea más fácil que comiencen a echar raíces, asegurándote de reemplazar el agua cada día y mantenerlo en el mismo nivel.
Luego, si optamos por un cultivo en maceta, debemos llenarla a ¾ de su capacidad con tierra. Ya sea en el huerto o en la maceta, realizaremos pequeños hoyos de 4 pulgadas profundo con ayuda de la palita. Colocaremos una semilla de lichi en cada orificio, cubriremos con tierra y humedeceremos con un poco de agua. En este punto es menester saber que la tierra deberá mantenerse húmeda todo el tiempo y de esta forma notaremos que después de un mes comenzaremos a ver los brotes.
Ya sea huerto o maceta, el lichi tendrá que ubicarse en el cultivo con una buena exposición solar, ya que mientras más luz reciba, mejor. Al mismo tiempo, especialistas sugieren que para que esta fruta crezca en óptimas condiciones, el suelo deberá tener un pH neutro o ligeramente ácido, sin exceso de materia orgánica.
