¿Qué le pasa a tu cuerpo si comes mucho pan de muerto?

El pan de muerto es un manjar que inunda el ambiente con su irresistible aroma y sabor durante la temporada de Día de Muertos y también es un elemento icónico de las ofrendas en México. Sin embargo, ¿alguna vez te has preguntado cuáles son las consecuencias de su consumo excesivo? A continuación, exploraremos el origen de este tradicional pan y qué es lo que sucede si comes mucho pan de muerto.

Según el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, el pan de muerto tiene sus raíces en las antiguas culturas prehispánicas, donde se realizaban las primeras ofrendas. Estas ofrendas estaban dedicadas a la diosa Cihuapipiltin, honrando a las mujeres que perdían la vida durante su primer parto. Los panes colocados en estas ofrendas adoptaban diversas formas, como mariposas o rayos, y estaban elaborados a partir de amaranto y pan de maíz seco y tostado. Estas tradiciones antiguas han perdurado a lo largo de los siglos y siguen siendo una parte esencial de las celebraciones del Día de Muertos en México.

Hoy en día, podemos disfrutar de una amplia variedad de pan de muerto, que va desde el clásico azucarado hasta opciones más innovadoras, como aquellos que incorporan ajonjolí o están rellenos de chocolate o crema batida. Indudablemente, su consumo es un verdadero placer para los sentidos, pero es importante mantener precauciones, ya que el exceso puede tener efectos negativos en la salud.

Esto es lo que le pasa a tu cuerpo si comes mucho pan de muerto

Según una encuesta de Statista respaldada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), aproximadamente el 94 por ciento de los encuestados en México consumen pan de muerto. Aunque es un alimento popular, su consumo excesivo puede tener consecuencias negativas para la salud debido a su alto contenido calórico. El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que una porción de 100 gramos de pan de muerto azucarado contiene 417 kcal, y si se acompaña con una taza de leche con chocolate, se suman 200 kcal adicionales.

La OMS recomienda un consumo diario de 2,000-2,500 kcal para hombres y 1,500-2,000 kcal para mujeres. El pan de muerto, aporta un exceso de carbohidratos y azúcares cuando se come frecuentemente, aumentando la ingesta calórica y contribuyendo al aumento de peso. Los especialistas en nutrición alertan que el consumo elevado de azúcares y carbohidratos, como los del pan de muerto, se asocia con diversas patologías de salud. Además, especialistas en nutrición advierten que el consumo en exceso de azúcares y carbohidratos se relaciona con diversas patologías, como: 

• Obesidad
• Alteraciones hepáticas
• Diabetes
• Enfermedad cardiovascular 
• Hígado graso 

Debido a esto, el IMSS aconseja consumir solo una porción, no un pan completo, ya que un pan de muerto de tamaño regular equivale a unas 4 raciones. Además, es importante considerar las bebidas que acompañan el pan. Un estudio de la Universidad de Harvard sugiere que las opciones más saludables, además del agua, son el café o té sin azúcar. También se pueden tomar con moderación la leche descremada y el jugo natural. Para una alternativa al chocolate caliente con menos calorías, se recomienda una cocoa caliente con leche baja en grasa o agua.