Con este abono casero, tu Corona de Cristo florecerá en tiempo récord

La Corona de Cristo es una planta elegante y sofisticada, caracterizada por tener espinas (de hecho, su nombre proviene de ahí) y flores rojo pasión (aunque en casos también las podemos ver blancas o rosas). Y para disfrutar de la belleza de esta planta, es menester aplicar un abono casero para ayudar en su floración, más todavía en invierno, donde el ejemplar no crece por cuestiones lógicas.

El abono casero para ayudar en la floración de tu Corona de Cristo

Si quieres tener una Corona de Cristo fuerte y sana, puedes ayudar en su crecimiento con un abono casero económico y orgánico. Expertos en jardinería aseguran que las cáscaras de huevo son fundamentales para el crecimiento de la Euphorbia mili. Es que con este desecho, le aportaremos calcio, potasio y magnesio, lo cual incidirá en la floración del ejemplar.

Para esta tarea de jardinería, lo primero será recolectar cáscaras de huevo. Entonces, cada vez que en casa cocinamos y consumimos huevo, será necesario guardar las cáscaras. Cuando ya tenemos una buena cantidad, las dejaremos secar al sol. A continuación, trituraremos esos pedazos pequeños para obtener el polvo que beneficiará a la Corona de Cristo.

Cuando tengamos el polvo, será menester añadirlo al sustrato de la planta. Después de agregar el abono casero de las cáscaras de huevo a tu Corona de Cristo, asegúrate de regar bien la planta para que el suelo se humedezca y las cáscaras puedan comenzar a descomponerse, liberando los nutrientes mencionados anteriormente.

De esta forma, tu Corona de Cristo florecerá rápidamente, aprovechando las propiedades del huevo que serán absorbidas por sus raíces.