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Delicados y coquetos: la grafología nos muestra a alguien distinguido según como escribe la letra V
Presta atención a los siguientes detalles en una persona al momento de dibujar la letra "V". Si tiene alguno de estos patrones, la grafología nos dice que estamos frente a una persona muy delicada y cuidadosa de las apariencias.¿Cuánto puede decir la manera en que escribes sobre ti y tu personalidad? Pues, la respuesta es: "mucho". Y es que la grafología es la disciplina que permite identificar, por medio de la escritura a mano, los principales rasgos de tu personalidad y conducta, Es decir, con solo ver la manera en que una persona plasma las letras en una hoja de papel, podemos tener una idea general de frente a quien estamos.
Claro que esta especie de combinación entre letra manuscrita y psicología no es algo infalible y 100% exacto, sino que suele estar basada en conceptos generales y patrones comunes. De hecho, la grafología jamás podría reemplazar a la psicología, aunque sí toma de ella las nociones básicas y las combina con la forma de escribir.

¿Eres delicado y coqueto? La grafología y la forma en que escribes la letra "V" tienen la respuesta
La inclinación de las letras escritas en la hoja, las curvas y líneas de cada una de las letras, la apertura de los espacios abiertos y la fuerza con que se trazan; todos estos son los detalles de las letras realizadas a mano a los que debemos estar atentos -según la grafología- para tener algunas nociones básicas sobre los patrones de comportamiento de una persona.
La letra "V", por ejemplo, puede decirnos mucho sobre una persona y, a la vez, decirle a esas personas sobre nosotros. Para dibujarla, hay que imitar un triángulo, aunque con el vértice en la parte de abajo y la base arriba. Además, la línea recta que completa generalmente el triángulo y que hace de base, en este caso no se dibuja. Hasta allí, una descripción básica de la V, aunque sin entrar en el terreno de la grafología.

Sin embargo, para conocer si una persona es delicada y coqueta, a lo que hay que prestar atención es a la simetría de las dos líneas diagonales que confluyen en la parte baja. Si estos trazos son prolijos y aparentan una inclinación similar -lo que da la simetría-, estamos ante una persona muy atenta y cuidadosa de todos los detalles. Incluso, la grafología también nos llama a detenernos en la extensión de ambas líneas. Si su altura es similar y no hay una más alta o baja que la otra, sin dudas estamos ante una persona que cuida las apariencias.