Así se reza de forma correcta la la oración a San Miguel Arcángel para momentos difíciles

En el plano de la espiritualidad y la Divinidad, existe 72 Ángeles de la Guarda. Pero, por sobre ellos, se destacan 7 Arcángeles, quienes son los principales emisarios de Dios en los sueños, en la tierra y en donde quiera que se haga su voluntad. Incluso, entre los 7 Arcángeles hay uno que es más importante y ponderado que los demás. Se trata del Arcángel San Miguel.

Las distintas religiones sostienen la existencia de ángeles, de seres que siempre rodean al Ser Supremo y quienes funcionan como enviados y protectores de las personas dentro de la misericordia divina. De acuerdo a las Sagradas Escrituras, los Arcángeles son Miguel, Jofiel, Chamuel, Gabriel, Rafael, Uriel y Zadkiel. Y su misión primordial es la de acompañar, asistir y proteger a los humanos.

Así se debe invocar a San Miguel Arcángel para que nos ayude en los momentos más difíciles

Cada uno de los Arcángeles, según la espiritualidad, tiene su función y sus virtudes bien definidas. San Miguel Arcángel es el encargado de proteger a las personas, de darles poder y -también- de otorgarles la fuerza necesaria para sobrepasar adversidades y momentos de intenso pesar. El domingo es el día por excelencia de San Miguel Arcángel.

Existen dos formas de invocar a San Miguel Arcángel. La primera de ellas es mediante la meditación. En este caso, se debe encender una vela azul, preferentemente un domingo -aunque, en casos de extrema necesidad se puede obviar este detalle- y se debe iniciar una profunda, silenciosa y sentida meditación. Automáticamente, si logramos cumplir nuestro objetivo, nos sentiremos envueltos de un aura de color azul -justamente- y sentiremos que el manto protector de San Miguel Arcángel se extiende sobre nosotros. Al finalizar la meditación, debe repetirse la siguiente expresión: "Así sea, así sea, así sea".

La oración es la otra forma, más potente, de invocar a San Miguel Arcángel. También se recomienda iniciarla un día domingo y debe repetirse durante 21 días ininterrumpidos. También encendiendo una vela azul, se le reza a San Miguel Arcángel pidiéndole que nos proteja bajo su escudo y nos aleje y libere de los malos y los peligros. Al finalizar la oración, se debe repetir -nuevamente-- el "así sea, así sea, así sea".

La Oración a San Miguel Arcángel. 

"¡Oh, gloriosísimo San Miguel Arcángel! Príncipe y caudillo de los ejércitos celestiales, custodio y defensor de las almas, guarda de la Iglesia, vencedor, terror y espanto de los rebeldes espíritus infernales.

Humildemente te rogamos, te dignes librar de todo mal a los que a ti recurrimos con confianza; que tu favor nos ampare, tu fortaleza nos defienda y que, mediante tu incomparable protección adelantemos cada vez más en el servicio del Señor.

Que tu virtud nos esfuerce todos los días de nuestra vida, especialmente en el trance de la muerte, para que, defendidos por tu poder del infernal dragón y de todas sus asechanzas, cuando salgamos de este mundo seamos presentados por ti, libres de toda culpa, ante la Divina Majestad.

Amén"

Si bien se recomienda iniciarla un domingo, también se puede hacer en otro momento y siempre y cuando la urgencia o la situación lo ameriten. No debes olvidar encender la luna azul cada vez que le rezas a San Miguel Arcángel.