Una cucharadita de esta bebida alcohólica en el abono casero y tus plantas estallarán de flores

Para que tu jardín luzca radiante y sea la envida de todo el vecindario, tienes que seguir sencillos trucos de jardinería que te van a ayudar a tenerlo radiante. En este caso, una cucharadita de esa típica bebida alcohólica que de seguro tienes en al heladera te va a servir para que tus plantas estén estalladas de flores durante todo el año. Toma lápiz y papel y sigue estos consejos.

Es sabido que en jardinería, convertir desechos cotidianos en nutrientes vitales para nuestras plantas es una práctica tan ingeniosa como ecológica. Tiene dos ventajas, ayudamos al ambiente y, además, no gastamos dinero. En este caso, una cucharadita de cerveza te va ayudar a mantener ese jardín como siempre lo soñaste. Y es que la cerveza contiene proteínas, minerales y azúcares que son nutrientes esenciales para las plantas. Estos elementos ayudan a mejorar la calidad del suelo, estimular el crecimiento de las raíces y fortalecer la resistencia de las plantas a las plagas y enfermedades.

El secreto para mantener sanas y activas a tus plantas con cerveza

¿Cómo te puede ayudar la cerveza para mantener el abono de los plantas? La receta consiste en mezclar un litro de agua con 20 mililitros de vinagre, añadir 10 mililitros de cerveza y completar con 5 gramos de bicarbonato. Este conjunto de ingredientes, al parecer dispares, encierra la clave para un suelo más saludable y aireado, condiciones óptimas para que las raíces de las plantas se expandan y absorban mejor los nutrientes.

Una vez obtenida la mezcla, el procedimiento es sencillo: basta con regar las plantas con esta solución cada diez días. Este gesto regular garantiza un suelo esponjoso, capaz de retener la humedad necesaria sin saturarse de agua, facilitando así una transpiración adecuada. El resultado no tardará en manifestarse, con flores y follaje mostrando una vitalidad renovada, más intensa y viva que nunca.

Este método, además de ser un aliado para la belleza de nuestro jardín, se alza como un estandarte de la jardinería ecológica. Al recurrir a componentes habituales en cualquier hogar, se evita el uso de productos químicos que pueden resultar nocivos tanto para las plantas como para el ecosistema en su conjunto. Es importante recordar que hay que rociar las plantas con este abono casero, una vez cada diez días.