Problemas de salud

Los problemas de salud que puedes sufrir por tallarte los ojos

Al tallarse los ojos con los dedos, nudillos o palmas, que pueden albergar bacterias, aumenta el riesgo de infecciones oculares como la conjuntivitis, manifestada por enrojecimiento, inflamación y secreciones.
martes, 16 de julio de 2024 · 20:15

Tallarte los ojos es una respuesta habitual ante la comezón o irritación, indicando posibles enfermedades o alergias. No obstante, según expertos, esta acción conlleva riesgos serios para la salud ocular, desde infecciones hasta daños estructurales, que pueden impactar negativamente en la visión. Es esencial estar consciente de los problemas de salud asociados con esta práctica para evitar complicaciones oculares a largo plazo.

Al tallarse los ojos con los dedos, nudillos o palmas, que pueden albergar bacterias, aumenta el riesgo de infecciones oculares como la conjuntivitis, manifestada por enrojecimiento, inflamación y secreciones. Además, este hábito puede provocar la ruptura de vasos sanguíneos en los ojos, causando enrojecimiento y pequeñas hemorragias que, aunque no representan un peligro grave, pueden resultar molestas desde el punto de vista estético.

El frotarse frecuente de los ojos puede desencadenar queratocono, una condición donde la córnea se deforma y debilita gradualmente, resultando en visión borrosa y distorsionada. Este hábito puede acelerar el progreso del queratocono al afectar la integridad de la córnea. Además, existe el riesgo de dañar o rayar la superficie de la córnea, lo que incrementa la probabilidad de infecciones y cicatrices que comprometen la visión.

Frotarse los ojos en pacientes con glaucoma puede resultar en daño al nervio óptico y aumento de la presión intraocular, exacerbando la condición y eventualmente llevando a la pérdida de visión. Además, las personas con miopía o enfermedades de la retina tienen mayor riesgo de desprendimiento de retina si se frotan los ojos con regularidad, debido a la posible tensión adicional en las estructuras delicadas de la retina.

Para prevenir los daños por frotarse los ojos, es esencial abordar y tratar las causas subyacentes de la irritación o picor ocular. Consultar con un oftalmólogo para identificar la raíz del problema es crucial si experimentas picazón frecuente. Usar lágrimas artificiales con regularidad puede mantener los ojos lubricados y limpios, reduciendo así la necesidad de frotarlos y mitigando posibles complicaciones oculares.