ÁNGEL DE LA GUARDA
El ángel de la guarda Seheiah abre nuevos caminos y bendice con fortuna a estas personas en agosto
La misión del ángel de la guarda Seheiah es proteger a las personas contra accidentes y enfermedades, brindando longevidad y sanación. Además, ofrece intuición y sabiduría para tomar decisiones importantes.El ángel de la guarda Seheiah es conocido por su poder protector y sanador. Este ángel ofrece a sus protegidos longevidad, intuición y la capacidad de tomar decisiones prudentes, además, Seheiah tiene la misión de abrir nuevos caminos y bendecir con fortuna a quienes invocan su ayuda. Su influencia es especialmente poderosa en ciertas épocas del año, proporcionando bienestar a ciertas personas.
En agosto, el ángel de la guarda Seheiah abre nuevos caminos y bendice con fortuna a las personas nacidas entre el 3 y 7 de agosto. Durante este mes, estos individuos pueden experimentar un flujo de oportunidades y buena suerte en diferentes aspectos de sus vidas, la energía de este ángel les permite superar obstáculos y avanzar con confianza hacia sus metas.
Aquellos nacidos bajo la protección de Seheiah, especialmente en los primeros días de agosto, se encuentran en una posición favorable para recibir bendiciones significativas, la fortuna y el éxito se manifiestan en sus vidas de manera tangible, ya sea en el ámbito profesional, personal o espiritual. Este ángel les proporciona la claridad y el coraje necesarios para aprovechar al máximo las oportunidades que se presentan en su camino.
La influencia de Seheiah en agosto no solo abre nuevos caminos, sino que también asegura que sus protegidos estén bien preparados para enfrentar cualquier desafío. Con su guía, las personas nacidas entre el 3 y 7 de agosto pueden confiar en que están siendo conducidas hacia un futuro brillante y próspero; incluso este ser alado bendice con mucha fortuna a estas personas cada que lo invocan.
Oración al ángel de la guarda Seheiah
Ayúdame, Señor, a tomar conciencia de mis errores,
para que no sean los padecimientos
la única vía para alcanzar la conciencia de las cosas.
Sobre mí gravita un pesado karma
y quiero que me ayudes a dar todo lo que se me pide,
sin que mi personalidad mortal ponga obstáculos
al cumplimiento de mis obligaciones.
Y si soy acreedor a ciertos privilegios,
guíame para que administre con prudencia
los bienes que reciba del Eterno.
Protégeme, Señor, cuando mi salud flaquee;
ilumina mi alma para que comprenda el sentido de la prueba
y ya, limpio de las escorias de mi pasado,
haz de mí una columna de Tu Templo.