Astronomía
¿Cómo se originó el agua en la Tierra? Estudio lo revela
Un estudio francés apunta a una posible explicación del origen del agua en nuestro planeta y todo apuntaría a los meteoritosUno de los grandes misterios alrededor de nuestro planeta es el origen del agua. Un nuevo estudio apunta a un tipo especial de meteoritos, que pudieron proporcionar a la proto-Tierra hasta tres veces la masa de agua de sus océanos.
La investigación se centra en el estudio de los meteoritos condrita de enstatita (CE), que se forman en el interior del Sistema Solar y que también se tratarían de uno de los "bloques" con los que se empezó a formar el planeta.
El estudio fue publicado en la revista Science y realizado por el Centro Francés de Investigaciones Petrográficas y Geoquímicas. Éste midió el contenido de hidrógeno y la relación deuterio/hidrógeno en trece meteoritos y hallaron que estos albergan mucho más hidrógeno del que se presumía.
A su vez, los investigadores destacan que los materiales similares a la CE que se fusionaron para la formación del planeta "podrían haber suministrado suficiente hidrógeno a la proto-Tierra en crecimiento para proporcionar al menos tres veces la cantidad de agua en los océanos actuales".
Según Laurette Piani, quien estuvo a cargo de la investigación, afirmó que las CE que componen el Sistema Solar Interno pudieron haber contribuido significativamente a la formación de la Tierra, a través de los bloques de construcción.
Meteoritos sugieren el origen del agua en la Tierra
Otro de los autores de la investigación, Lionel Vacher, destacó que lo más interesante de este descubrimiento es que "las condritas de enstatita, que se creían casi 'secas', contienen una alta abundancia de agua inesperadamente".
"Si las condritas de enstatita fueran efectivamente los bloques de construcción de nuestro planeta -como se sugiere fuertemente por sus composiciones isotópicas similares- este resultado implica que estos tipos de condritas suministraron suficiente agua a la Tierra", dijo Vacher.
El estudio también revela que el nitrógeno atmosférico, el componente más abundante de la atmósfera, también pudo haber venido de las CE.