Independencia de México: Juegos para celebrar el 15 de septiembre desde casa

Este 15 de septiembre son los festejos por la Independencia de México. Es una noche de fiesta mexicana, comida tradicional: pozole, tamales, taquizas, pambazos, sopes, muchas tostadas. 

Es un día de reunión familiar, pequeña, por el Covid-19, pero entre los brindis y la comida también se suele jugar con la familia. Hay varios juegos mexicanos muy divertidos que puedes jugar con tus seres queridos. 

Lotería: 

Este es un juego muy divertido y ágil, requiere de varios jugadores y que estén cien por ciento concentrados, pues uno de ellos ira sacando cartas, que el resto debe marcar en sus cartoncillos. El primero en marcar todas sus cartas gana, pero, si marcó una imagen que no había salido, automáticamente pierde. 

Serpientes y escaleras: 

Se trata de un juego conformado por un tablero en el que se mueven las fichas de acuerdo al resultado de los dados. Si el jugador cae en una escalera, puede ascender a una casilla del siguiente nivel, mientras que en las serpientes tendrá que descender. El primero en llegar a la meta, gana.

Basta:

Uno de los juegos más conocidos en nuestro México y que no requiere de mucho. Sólo se necesitan unas cuantas hojas de papel y algo con qué escribir. Consiste en seleccionar algunas categorías, luego, uno de los participantes dirá en voz alta "a", mientras sigue en su mente con el resto de abecedario, luego otro le dirá basta y el detendrá su repaso del abecedario y mencionará la letra en la que se quedó. Entonces, todos deberán escribir una palabra que inicie con esa letra en cada una de sus categorías. 

El primero en terminar inicia una cuenta regresiva hacia atrás y al finalizar, nadie puede escribir, entonces, cada participante comenzará a decir la palabra que puso y se asignará puntos, si no se repiten, son 100 a cada uno, pero si se repiten, quienes la tiene repetidas solo se ponen 50 puntos, gana el que más puntos haga.

Damas chinas: 

Este juego es un tablero con una estrella de seis picos y perforaciones en cada esquina. En estos hoyos se colocan pequeñas canicas que hay que cruzar hasta el lado contrario, un movimiento a la vez. Este juego es de origen alemán y se remonta a 1892.