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Las marcas de chorizo que te mienten por tener soya y exceso de sodio, revela Profeco
El análisis minucioso de 49 productos de chorizo revela una situación preocupante: nueve de ellos incluyen soya sin que este ingrediente esté claramente indicado en su etiqueta.Un estudio realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha destapado irregularidades en la composición de los chorizos de pavo y cerdo. Aunque se espera que estos productos contengan únicamente carne de los animales mencionados, se ha encontrado la presencia de soya y niveles de sodio en exceso. Este hallazgo revela una práctica engañosa por parte de algunas marcas de chorizo.
El análisis minucioso de 49 productos de chorizo revela una situación preocupante: nueve de ellos incluyen soya sin que este ingrediente esté claramente indicado en su etiqueta. Esta falta de transparencia puede generar confusión y exponer a los consumidores a ingredientes no deseados. La Revista del Consumidor detallará estos hallazgos en su próxima edición, prevista para junio, lo que permitirá a los consumidores tomar decisiones informadas sobre sus compras.
Marcas de chorizo que te mienten por tener soya y exceso de sodio, según Profeco
El estudio evaluó chorizos tanto frescos como madurados, confeccionados con diferentes tipos de carne como cerdo, res y pavo, además de ingredientes no cárnicos como soya, chícharo y champiñones, entre otros. Según David Aguilar Romero de la Profeco, varias marcas mienten en su etiquetado, presentándose como chorizos de cerdo o pavo, pero también incluyen ingredientes como pollo o soya:
- Chata bicentenario, chorizo de cerdo de 215 gramos.
- Chata Ranchero, chorizo de cerdo de 215 gramos.
- Chata Rico, chorizo de cerdo de 180 gramos.
- Chimex, chorizo de cerdo casero de 200 gramos.
- Fud, chorizo de pavo de 200 gramos.
- Lala Maestros Parrilleros, chorizo de cerdo para asar de 400 gramos.
- Parma Sabori, chorizo de pavo de 200 gramos.
- Zwan, chorizo de cerdo Cantimpalo de 400 gramos.
- Chata, chorizo de champiñón molido con mezcla de chiles de 200 gramos.
Aguilar Romero comentó que es la primera vez que se revisan diferentes marcas de chorizo. Sugirió que las autoridades competentes evalúen cuánta soya puede usarse en chorizos de carne. La única normativa que rige el chorizo es la de etiquetado, como la NOM-051-SCFI/SSA1-2010 y la NOM-002-SCFI-2011, que establecen límites y verificaciones para productos envasados. También se analizó el nivel de sodio en el chorizo, descubriendo que seis productos tienen más sodio del indicado:
- Conde de Luna, chorizo argentino de 320 gramos. Contiene 800 miligramos de sodio por cada 100 gramos, pero dice contener 564 miligramos de sodio.
- Conde de Luna, chorizo semimadurado, de 300 gramos. Declara 685 miligramos de sodio por cada 100 gramos, pero en realidad contiene 777 miligramos.
- Chata, chorizo de champiñón molido con mezcla de chiles, de 200 gramos. Contiene 498 miligramos por cada 100 gramos y declara 332 miligramos por cada 100 miligramos.
- Obertal, chorizo ranchero de 550 gramos. Contiene 130 miligramos más de sodio por cada 100 gramos, ya que su etiqueta dice contener 730 miligramos, pero realmente son 860 miligramos.
- Parma, Chorizo Sartha de 250 gramos, dice contener mil miligramos por cada 100 gramos y en realidad trae mil 588 miligramos por cada 100 gramos.
- Zwan, chorizo de cerdo Cantimpalo de 400 gramos, indica un contenido de 739 miligramos por cada 100 gramos, pero trae 840 miligramos de sodio.
Durante la investigación de Profeco, se descubrió que ciertos productos están etiquetados como "chorizo con pavo" en lugar de "de pavo", lo que sugiere la inclusión de carne de cerdo, pollo y/o soya en distintas cantidades, sin especificarse claramente en la lista de ingredientes. Asimismo, se constató que los chorizos de cerdo contienen grasa de cerdo además de la carne, mientras que en los de pavo se añade aceite vegetal como componente adicional.