'La Casa de Papel' y 'Sky Rojo': las 3 razones por las que son FUROR en Netflix

Álex Pina lo hizo de nuevo y, al igual que con La Casa de Papel; su serie más reciente -Sky Rojo- no tardó en convertirse en una de las series sensación de a plataforma de streaming Netflix. El director español es el cerebro detrás de Sky Rojo, la serie que fue estrenada en la plataforma el 19 de marzo y es una de las producciones con más visualizaciones de habla hispana.

La historia de tres mujeres que han sido forzadas a trabajar como prostitutas en un club nocturno de Tenerife tras llegar de diferentes países engañadas para cumplir trabajos de camareras ha cautivado a los espectadores de distintos puntos del mundo. Y la forma en que Alex Pina refleja desde los martirios que sufren las jóvenes hasta la venganza que planifican ha dado que hablar.

Protagonizada por Verónica Sánchez (Coral), Lali Espósito (Wendy) y Yani Prado (Gina) en los papeles de las tres prostitutas fugitivas, y con protagónicos de Miguel Ángel Silvestre (Moisés) y Asier Etxeandia (Romeo); la ficción tiene algunas similitudes con La Casa de Papel.

Ya sea por algunos recursos, la forma en que está relatada y las situaciones que rozan la ciencia ficción casi burda; son -por lo menos- 3 las grandes similitudes entre Sky Rojo y La Casa de Papel. Y las repasamos a continuación.

Contadas por sus protagonistas

Las dos series dirigidas por Álex Pina y que integran el listado de fenómenos españoles que hicieron -y harán- historia en Netflix cuentan con una primera coincidencia entre sí: la historia está relatada por una de las protagonistas de ambas ficciones. Y sus relatos se van entrelazando con las situaciones reconstruidas en plenitud.

Mientras que en La Casa de Papel es Tokio (una de las integrantes de la banda, interpretada por Úrsula Corberó) quien relata los pormenores de cada situación que vemos en pantalla -lo hace para agregarle detalles en cuanto a sentimientos-; en Sky Rojo la voz en off que relata las situaciones está centrada en Coral, una de las prostitutas interpretadas por Verónica Sánchez.

Sin embargo, a diferencia de La Casa de Papel -donde el monopolio de la voz en off está focalizado en Tokio-; en Sky Rojo el relato que acompaña cada situación va rotando entre las tres protagonistas; Coral, Wendy y Gina.

Empoderamiento femenino

En Sky Rojo, la temática es más que elocuente: visibilizar -de una manera bastante particular- el martirio y la pesadilla que es la vida de las prostitutas en los clubes nocturnos. Pasando sus vidas privadas de la libertad, llevadas a esta vida mediante engaños en torno a "un trabajo mejor y una vida digna" y mantenidas secuestradas y rehenes de deudas de dudosa veracidad.

Todo esto es lo que Coral, Wendy y Gina evidencian en el momento en que deciden decir "¡Basta!" a toda esa explotación inhumana y le rompen el cráneo en dos -literalmente- a su proxeneta para iniciar su sueño de libertad. A lo largo de todos los episodios, no solo queda bien en claro las torturas de la vida que llevaban; sino el empoderamiento de las mujeres.

Aunque en La Casa de Papel no existe una denuncia social tan fuerte como la que vemos en Sky Rojo -referida a que la vida de las trabajadoras sexuales está muy lejos de ser de disfrute-; el realzamiento de la figura de la mujer es notable. Por empezar, con Tokio (Úrsula Corberó) y Nairobi (Alba Flores) como integrantes de la banda inicial que comanda El Profesor (Álvaro Morte).

Si hasta la propia Nairobi inmortaliza en uno de los episodios la memorable frase: "¡Empieza el matriarcado!". Además, los roles de la Inspectora Raquel Murillo (interpretada por Itziar Ituño), quien luego se cruza de bando; y de quien la reemplaza para negociar con los secuestradores (la inspectora Sierra, interpretada por Najwa Nimri) son claves en la trama de La Casa de Papel.

Situaciones que elegimos creer

Tanto en La Casa de Papel como en Sky Rojo las escenas de adrenalina y acción abundan. Desde persecuciones en vehículos a toda velocidad hasta intercambios de disparos con armas de todo tipo. Incluso, en La Casa de Papel llegamos a ver cómo los miembros de la banda de El Profesor manipulaban una bazooka con la misma simpleza con que se manipula un arma de juguete.

En Sky Rojo, en tanto, encontramos una violenta pelea entre uno de los sicarios enviados por Romeo (proxeneta de las jóvenes prostitutas que recuperan su libertad) y un paramédico en el interior una ambulancia que llega a tornarse en graciosa por la cantidad de golpes y la forma en que se agreden mutuamente (con desfibrilador incluido, por ejemplo).

Estas son solo dos de las escenas plagadas de acción de ambas series (una de cada una) que rozan lo absurdo y que, si intentamos trasladar todo esto a la realidad; es -cuando menos- imposible y absurdo de ser replicado o que el desarrollo sea el que vemos en la serie. 

Sin embargo, son esas licencias que -tácitamente- uno acepta al comenzar a ver cualquiera de estas dos grandes y exitosas producciones: entender que es una ficción y aceptar que, bajo ningún punto de vista, algo así podría replicarse en la vida real. Una vez que se acepta este acuerdo, el disfrute de las series de Pina y sus escenas es más pleno todavía. ¡Y hasta gratificante!.