Netflix

Carlos Cuevas habló finalmente de su orientación sexual: “No sé por qué se me asume una u otra”

El protagonista de Merlí vuelve a la pantalla de Netflix y habló de cómo se interrelacionan sus personajes y su vida privada.
viernes, 16 de octubre de 2020 · 07:19

El actor español de 24 años de edad, Carlos Cuevas, ha realizado personajes que han calado en lo hondo de los fanáticos. Así comenzó a ser conocido con su papel de Biel Delmàs en la serie Ventdelplà y luego se consagró poniéndose en la piel de Pol Rubio en Merlí y luego su spin-off, Sapere Aude.

En estas dos últimas, Pol descubre con el paso de los capítulos que es bisexual y cómo finalmente se queda con Bruno, el hijo de su profesor Merlí. Este 16 de octubre, Carlos protagonizará una nueva miniserie de Netflix creada por Manolo Caro, llamada “Alguien tiene que morir”.

Entre los actores más jóvenes de la tira se encuentran Ester Expósito, Alejandro Speitzer y Cecilia Suárez. La serie quiere reflejar lo que podían suponer meros rumores de homosexualidad en la época franquista. Fue por ello que el protagonista de Merlí contó un poco de su papel: "La lucha constante de mi personaje es construirse una coraza impermeable para asumir todo aquello que el Régimen le da y todo lo que tiene él que corresponder. Su lucha interna es muy interesante".

Fuente: Instagram @carloscuevas

Además, Carlos Cuevas habló de su propia experiencia: "Yo nunca me he pronunciado alrededor de mi orientación sexual personal, no sé por qué se me asume una orientación sexual u otra". Y habla de su profesión como actor: "La interpretación son máscaras y lo divertido de nuestro oficio es interpretar a personajes que son diferentes a nosotros. Pienso que es chulo que podamos interpretar a tantos personajes como se nos dé la oportunidad y que la orientación sexual personal de un actor o actriz no sea una barrera para interpretar personajes".

Fuente: Instagram @alejandrospeitzer

Por su parte, en la entrevista que ambos dieron al sitio Ecartelera, Alejandro Speitzer opinó: “Tiene que haber oportunidades para todos. Es clarísimo que la industria se tiene que abrir mucho más. No hay que ser asesino para hacer de un asesino". Y agregó: "No veo un problema ni veo mal que en mi caso, por ejemplo, al no ser homosexual no pueda personificar a un personaje homosexual. Somos actores y estamos para contar historias y para adentrarnos en personajes que no se acerquen a nosotros".