Los difíciles días finales del gran músico
"El show debe continuar": el increíble esfuerzo de Freddie Mercury para grabar su última canción
En el ocaso de su vida, y mientras atravesaba un delicado momento de salud, el guitarrista Brian May le propuso a Freddie grabar con Queen un tema escrito por él mismo. Aunque May tenía dudas, Freddie aceptó. Ese tema fue "The Show Must Go On", que se convirtió en un emotivo himno de despedida.
Los últimos días de Freddie Mercury no fueron nada justos ni muy felices que digamos. Principalmente, por todo lo que sufrió el talentoso músico y quien atravesaba un durísimo momento en lo referido a su salud. Y, más allá de que no es algo que nadie merezca por lo general, si había alguien que no merecía pasar así sus últimos días; ese era el líder de Queen.
El 24 de noviembre de 1991, Freddie falleció y pasó a la inmortalidad. Un día antes, el músico británico había reconocido públicamente que tenía VIH Sida. La causa de su muerte fue una neumonía, agravada por el mencionado virus. Pero sus últimos días fueron una lenta y triste agonía.
La última canción que grabó
Sabiendo del duro momento que atravesaba y de su delicado estado, el guitarrista de Queen, Brian May había escrito una de las canciones que se convertirían en un himno del álbum Innuendo (1991): The Show Must Go On (o El Espectáculo debe Continuar). La canción terminaría por convertirse en una despedida de Mercury, pero su historia es más impactante aún.
May, el autor de la letra y la música, sabía que a Freddie le quedaba poco tiempo. Y no estaba del todo seguro de que Mercury pudiera grabarla. Pero Freddie sonrió hasta el final y, sabiendo que el espectáculo realmente debía continuar; accedió a grabarla. "Lo haré, querido", le respondió al guitarrista. Y, tras beber un sorbo de vodka para darle fuerza a su voz, comenzó a grabar.
Al igual que Innuendo, la hipnótica obra que da nombre al disco; The Show Must Go On no tuvo videoclip grabado en vivo o especialmente para la ocasión. Y es que Mercury no estaba en condiciones de aparecer en público por el temor a las repercusiones (el VIH era un tema tabú aún); por lo que el videoclip fue una conjunción de actuaciones en vivo ya viejas.
Sus últimos días
Al igual que durante los últimos 7 años de su vida, los instantes previos al fallecimiento de Freddie; a su lado estuvo su incondicional novio, Jim Hutton. Fue él quien recibió la carta pública que escribió Freddie para que el mundo entero conociera su duro padecer.
Durante sus últimos días de vida, Freddie sufrió quebraduras en sus huesos (muy débiles); por lo que debieron inyectarle morfina (droga a la que era alérgico).
