¿Quiénes eran los narco juniors, la pandilla de jóvenes que aterrorizó Tijuana en los 90?

En la década de los noventa, el estado de Tijuana vivió con mucho temor e incertidumbre debido a la consolidación de uno de los cárteles de droga más sanguinarios que pudo haber existido en México, el de los hermanos Arellano Félix, quieren dieron comenzaron con la tendencia de narco juniors en el país.

Los estragos del asentamiento de dicho cártel en la entidad continúan y, es que aunque ya han pasado años de que estos se desmoronaron, lograron realizar una excelente estrategia para comercializar la droga e ir haciendo crecer mucho más rápido el negocio, sin importarles las víctimas de esta mercadotecnia.

Fueron los jóvenes de los años noventa quienes fueron utilizados como conejillos de indias para hacer una red de narcotráfico, ya que primero les ofrecían droga gratis para así volverlos adictos y pudieran hacer lo que sea con tal de conseguir más de la sustancia, como por ejemplo ir a escuelas a vender narcóticos y hacer el mismo proceso que les hicieron a ellos para lograr consolidar una cadena de adicción.

Narcojuniors organizaban fiestas llenas de descontrol y drogas al por mayor

A parecer la táctica les funcionaba de maravilla, puesto que su modus operandi comenzaba en hacer grandes fiestas con invitados de prestigio, como lo era hijos de familias de alta sociedad en donde se les regalaba todo tipo de droga, como cocaína, marihuana, entre otros para engancharlos y después, invitarlos a vender en sus escuelas o en su lugar de trabajo.

Es importante señalar que todos estos grandes eventos eran orquestados por narco juniors encabezado por Ramón Arellano Félix, cuyo brazo derecho era Everardo ‘El Kitty’ Paéz, un mirrey descendiente de una adinerada familia y casado con la hija de un maquilador del norte del país. 

Y es que, al ser uno de los grupo de narcos más temidos no sólo en Tijuana sino en todo el país, ellos podía hacer lo que quisieran, pues si algún vecino se quejaba del ruido que hacían en la fiesta, se tenían que atener a las consecuencias en este caso la muerte, es por eso que periodistas de la época señalaron que una torre de departamentos, ubicada en la Zona del Río, fue abandonada por sus inquilinos por los desmanes ocasionados por los juniors.

Aunque también, se dice que compraron una fila de departamentos también ubicados en la entidad para poder realizar sus eventos con hijos de altos mandos, de ahí la denominación de narco juniors, ya que la mayoría de los asistentes si no que todos, se trataban de jóvenes que aún estudiaban o apenas iban a ejercer su carrera.

Estos narco juniors se hicieron cada vez más famosos conforme fue pasando el tiempo, ya que lo que sólo empezó con la venta de drogas a otros jóvenes y fiestas descontroladas se convirtió en una masacre pues se iban involucrando más en los problemas del cártel, hasta el punto de utilizar armas para proteger a los altos mandos.