¿Disfrutaste y extrañas a Vikingos? Esta es la atrapante serie turca que no puedes dejar de ver

Todavía lloramos y nos lamentamos por el final de Vikingos. No solo por la trama en sí, sino porque extrañamos maratonear y engancharnos con estos episodios y las aventuras y expediciones de Ragnar (primero) y de sus hijos (después). Si sientes un vacío existencial sin la producción de Michael Hirst, esta serie de Neflix es la indicada para que no dejes de ver.

Otomano: el ascenso de un imperio (2020) es el título de esta mezcla de documental y ficción (también llamado docu-ficción) turco que se encuentra disponible en el catálogo de la plataforma de streaming Netflix; y que resume de una forma muy didáctica y atrapante el sitio que el sultán Mehemed II realizó en Constantinopla hasta que finalmente la ciudad cayó en su poder.

A lo largo de los seis episodios que componen la producción, se combinan escenas actuadas y recreadas perfectamente -con tintes de ficción- sobre el enfrentamiento entre los Otomanos y los habitantes de Constantinopla (en aquel entonces, capital del Imperio Romano de Oriente) con testimonios de investigadores que han estudiado en profundidad este hito.

Y, para aquellos que tienen parte de su corazón también con las novelas y producciones turcas, vale aclarar que en Otomano: el ascenso de un imperio no faltan los condimentos de estas destacadas ficciones. Después de todo, es otra de las producciones turcas que tantos fanáticos en el mundo tienen. Y cuenta con la talentosa actriz Tuba Büyüküstün.

Atrapante

A diferencia de Vikingos -que está basada en acontecimientos históricos, pero sobre los cuales se ha tejido una historia ficticia-; en Otomano: el nacimiento de un imperio todos los conflictos y la trama se cierne perfectamente a lo que está documentado por la historia misma. De esta manera, encontramos a un Mehemed II enceguecido por cumplir la meta pendiente de su padre

.Y luego de mantener sitiada durante varias semanas la capital del Imperio Bizantino; los turcos logran tomar el poder de Constantinopla ante la rendición del emperador Constantino. Y, con esta victoria, se da inicio a una de las eras más fuertes de dominio: la del Imperio Otomano, que se extendió durante más de 600 años. 

Mehemed II, quien se convertiría luego en el primer sultán del Imperio Otomano, logró con sus tropas y su arduo trabajo lo que ningún otro de los 10 ejércitos que se lo platearon pudo hacer (incluido su padre): derrotar a los romanos en Oriente.

Cada capítulo consta de 45 minutos y una entretenida combinación entre la reconstrucción actuada del sitio y las batallas, y los aportes de los estudiosos investigadores. Un detalle vistoso y que también actúa como un imán es la reconstrucción de los rasgos culturales, los escenarios y las vestimentas de la época.